miércoles, 31 de julio de 2013

Capítulo 2 - Trouble, trouble, trouble




Las clases habían sido agotador.

Había pasado 1 mes desde que entré a la universidad. Me apañaba y me adaptaba como podía, pero tampoco me iba tan mal. Aquella tarde, había quedado con Cooper (aunque le llamaba Coops), que era mi mejor amigo, a comer. 

Conocía a Cooper desde que tenía 3 años. Éramos vecinos e íbamos al mismo colegio. Estuvimos juntos un tiempo en Secundaria, pero como nos sentíamos raros, lo dejamos, pero eso no dañó para nada a nuestra amistad. Era algo así como el hermano mayor que siempre quise tener y que necesitaba.

Él estudiaba Audiovisuales y era algo muy admirable a él, ya que sus padres querían que él estudiara medicina (ya que tenía una mente brillante) pero él se rebeló a sus padres y estudio lo que de verdad quería. Lo admiraba mucho por eso. Lo mejor de todo, es que nunca nos separamos desde el colegio, ya que íbamos hasta a la misma universidad. Fue y era mi mayor apoyo cuando Jeremiah murió. Siempre estaría agradecida con él por eso.

Esperaba fuera de la facultad de Comunicación y Audiovisuales cuando un grupo de chicas pasaron hablando escandalosamente.
- ¡Sí, tía! He escuchado que vienen en la ceremonia del nuevo curso. - afirmaba una de ellas.
- Pero llevamos un mes de clase, - contestaba la otra chica - ¿No han organizado un poco tarde la ceremonia?
- ¡Pues por eso mismo, tonta! - decía otra - ¡Los del conservatorio han hecho un esfuerzo gigante recogiendo firmas y promocionando para traerlos!
- ¡Dios, es genial! Llevo como casi toda la vida escuchándoles y verlos aquí y encima gratis... ¡Wow, es un sueño hecho realidad!
 Fruncí el ceño y vi como Coops salía por la puerta con su beanie habitual en la cabeza y su mochila colgando de su hombro.
- ¡Hey, lo siento! ¿Has esperado mucho? - preguntó.
- No mucho, en realidad. - contesté algo distraída - Oye, ¿por casualidad sabes quiénes van a actuar en la ceremonia del nuevo curso? Unas chicas estaban hablando de eso y parecían muy emocionadas.
Esbozó una sonrisa de medio lado.
- Eres una cotilla. - me acusó y luego rió - Pues no, no sé quienes son. Deberías preguntar al Departamento de música.
- Sí, supongo que lo sabrá Rachel.
Llegamos a la pizzería del campus y nos sentamos en una mesa. El local estaba más o menos lleno, ya que era Viernes. Hablamos de cosas que pasaron en Secundaria y de cosas que él y yo entendíamos. Y la verdad es que hacíamos bastante jaleo, porque nos reíamos escandalosamente.

Salimos de allí aún entre risas y casi entre lágrimas, cuando me choqué con alguien de espaldas.
- Perd...
- ¡Mira por dónde vas, mocosa! - respondió un chico con pelo despeinado rubio y con gafas de sol. ¿Gafas de sol en plena noche? Era ridículo. Se veía ridículo.
Fruncí los ceños, cabreada. Perdía los papeles con facilidad.
- Perdone. - solté casi de mala gana - Borde.
Lo último lo murmuré pero al parecer lo llegó a escuchar porque giró bruscamente la cabeza a mirarme. Alguien me cogió del brazo. Cooper.
- Summ. Summer. Ya vale. - dijo Cooper tranquilizándome. 
 - Eso. - añadió el tipo borde y odioso - Haz caso a tu novio. Baja los humos, chica.
- Él no es...
Casi salto a darle una cachetada, pero Cooper me sujetó. Ese tipo me estaba sacando de mis casillas.
- Buenas noches. - se despidió riéndose y entró a la pizzería. ¿Era también un universitario? Se veía como un par de años más mayor que yo, pero de mente, parecía tener menos.
 Cooper se  puso delante mía.
- ¿Se puede saber qué te ha pasado, Summ?
- Me ha pillado de mala hostia, eso es todo. - justifiqué con los brazos cruzados.
Suspiró.
- ¿La amiga del mes? - preguntó con ironía, sonriendo burlón.
Le pegué un golpe en el brazo.
- Odio que hagas ese tipo de bromas. Quiero un helado.
Me acarició la cabeza y negó con la cabeza, rendido.
- Vamos a por ese helado, entonces.

*************

Al día siguiente después de las tres primeras horas, me dirigía a la cafetería del campus para comer. Llevaba puesto los auriculares y tenía la mochila a un lado lleno de libros. Iba a encontrarme con Audrey, Rachel y Coops allí. Después de coger la bandeja, la comida y pagar, me dirigí a nuestra mesa de siempre y me senté.
- Hey. - saludé pero todos parecían atentos al tema del que estaban hablando y me sentía perdida.
Mordí mi manzana y presté atención.
- Te lo juro, Audrey. ¿Le gustaré? Probablemente le guste. ¿Y si no le gusto? Me preguntó si podía quedar hoy pero estoy tan líada que tuve que decirle que no. ¡Me da tanta rabia! - decía Rachel decepcionada.
Miré a Cooper confusa. Él las había conocido el segundo día de clase y ahora los 4 parecíamos como si nos conociésemos de toda la vida.
-  Ha conocido al batería del grupo que ha contratado para la ceremonia. Le pidió quedar hoy. - explicó mientras bebía de su refresco.
Puse los ojos en blanco y alcé una ceja.
- Gracias por la información innecesaria, pero sigo perdida. - dije.
Negué con la cabeza y seguí prestándole atención a Rachel, que hablaba ansiosamente con Audrey. Pero Audrey parecía tener ganas de darse cabezazos contra una pared. Estaba segura de que Rachel estuvo hablando de lo mismo todo el día.
- Harry es un amor, Auds. No es un capullo, te lo juro. - defendió Rachel.
- Pero está en una banda, Rachel. - afirmó Audrey - Cuando un tío pertenece a una banda, liga con todas. Es ley.
- Harry no es un capullo, Auds. - repitió Rachel, notablemente molesta pero a la vez ya un poco insegura.
Bebí de mi refresco. Todo aquello parecía una telenovela.
- Pero si fuese así, - dije interviniendo - ten cuidado, Rach. Ve despacio. No le tomes tan en serio por ahora.
- Coquetea. - añadió Cooper - He oído que a los baterías les ponen cachondos las universitarias...
 Rachel le dio un golpe en el brazo a Cooper mientras Audrey y yo estallábamos de risas.

*************

Los días siguientes se resumían en clases, grupo de amigos y residencia. No pasó nada interesante y estaba terriblemente aburrida aquellos días.

Finalmente, el tan esperado Día de la Ceremonia del Nuevo Curso había llegado. Todos tenían altas expectativas sobre aquel evento y yo no esperaba menos. Aquello era el trending topic desde que empezó el curso. Rachel había organizado aquello con mucho esfuerzo, incluso antes de que el curso empezara.

La ceremonia se iba a llevar a cabo en el Auditorio gigantesco de la universidad. Estaba sentada con los de mi facultad de Criminología y vi en unas butacas más adelante a Cooper, con los guapos de Audiovisuales (daba la casualidad que todos los chicos que pertenecían a la facultad de Comunicación y Audiovisuales eran todos terriblemente atractivos, como si fuesen famosos o sacados de revistasy eran más conocidos por aquello en la Universidad). Me saludó felizmente con la mano y yo hice lo mismo, sonriéndole.

Empezaron con el discurso típico de bienvenida a todo el alumnado en general de la universidad, dada por el director. Casi me duermo, pero luché por estar despierta. Supe que no era la única que se me hizo pesado porque todos tenían los ojos soñolientos.

Después del discurso del director, los de último año daban la bienvenida los de primer año y también explicaban lo emocionados que estaban por terminar sus estudios como universitarios/as. Pero a la vez estaban tristes. Según ellos fueron los mejores años de su vida, superando incluso los de Secundaria.

Terminado lo anterior, venía lo bueno. La esperadísima banda iba a tocar y para qué mentir, estaba intrigada por ellos, ya que no entendía por qué tanto revuelo. El primero que salió fue el batería, que supe que se llamaba Harry porque era el tipo que quería salir con Rachel. Ya se escuchaban gritos diciendo su nombre y él saludó con una mano, mientras con la otra sujetaba sus baquetas.

La parte de la derecha, lo cogió un rubio con una guitarra. Tenía puesta una camiseta de cuadros y los de mi facultad empezaron a gritar Tom. Supuse que era el líder de la banda. Parecía el favorito de mi facultad. Yo simplemente reí y grité unos Whooo.

Casi de la nada, apareció el que parecía el típico Showman del grupo. Lo filmaron en primer plano y su cara apareció en el plasma gigantesco que colgaba detrás, para que todos, incluso los que se sentaban a lo lejos, pudiesen ver el espectáculo entero. Aprecié pecas en su cara. Me pareció muy gracioso y el tipo tenía una sonrisa muy bonita. Los de la facultad, conservatorio y departamento de música gritaron su nombre: Danny.

Cuando creía que ya no faltaba nadie más, salió otro tipo con una cerveza en mano y un bajo azul eléctrico con luces. Parecía un árbol de Navidad cutre. El tío tenía unas gafas de sol negras y dejó la cerveza a un lado, en el suelo.

Oh no. No puede ser.

Me froté los ojos y los abrí como platos. Miré a Cooper aterrorizada, pero este estaba demasiado ocupado haciendo vítores al grupo.

Oh Dios mío.

El tipo al que por poco le daba una bofetada hacía unas semanas era del grupo. Pertenecía a la banda. Era de la banda.

Quería que la tierra me tragase por completo, qué bochorno. Me tranquilicé a mi misma diciéndome que a lo mejor no me recordaría.
- ¡Hola a todos! ¡Somos McFly! ¡Muchas gracias por invitarnos hoy y estar aquí! ¡Esperamos que disfrutéis de esta pequeña fiesta! - gritó Tom, muy animado.
Todos gritaron.

Sí, a lo mejor no me recuerda. Aquello pasó hace unas semanas...

Pero en el fondo sabía que era mentira. Tenía que salir de allí, o me iba a dar algo.


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¡Eso es todo, gente! Subiré cada capítulo cada Viernes (cuando pueda), pero hoy, es una excepción. Espero que os haya gustado y si queréis que os avise cada vez que suba capítulo dejadme vuestros twitters, y podéis hacerlo mencionandome en @JonesWeirdo.
¡Gracias por los comentarios en el primer capítulo! Significaron mucho para mí <3
¡Nos leemos pronto! 

sábado, 1 de junio de 2013

Capítulo 1 - Brand new day




Estar de pie en aquel lugar era horrible. Y aquel vestido negro de encaje lo era también.
Dicen que uno no debería presenciar la muerte de un familiar. Y menos con 16 años.

Habían pasado 2 años ya de aquel incidente y aún dolía. El dolor era insoportable. 
Juré que iba a encontrar al culpable de ello.

E iba a encontrarlo, fuera como fuese.

****
Los primeros días de clase siempre eran interminables. Era ley.
 Aunque cualquier chica estaría feliz por su primer día como universitaria.

La carrera que había elegido no era ni de lejos fácil, pero tampoco imposible. Quería estudiar Criminología e iba con eso en mente desde los 16.

¿La razón de haber escogido aquella carrera? Mi hermano murió en un accidente de coche. Yo estaba de piloto y él de co-piloto.

Veníamos de una fiesta y tuve que llevármelo conmigo. Íbamos por el autopista cuando otro coche del sentido contrario, chocó con nuestro coche. El coche dio un par de vuelcos y acabó destrozado. Me rompí un par de huesos y tenía cortes y heridas por todos lados, pero estaba viva.

Jeremiah no tuvo la misma suerte. Murió en el acto con 8 años de vida. 8 años que nunca podría recuperar.

No era justo. No era justo para él. No era justo para mi. Yo debería haber muerto, no él.

Aquel sentimiento de culpa me mataba cada día.

Y a raíz de aquello, supe que tenía que dedicarme a ello. La criminología iba a responder mis preguntas y me llevaría a descubrir quién fue aquel conductor que le quitó injustamente la vida a Jeremiah.

Así que, ahí estaba, en frente de la facultad de Criminología de la Universidad de Nueva York. Me costó mucho sacar notas de media de 9 en Bachillerato para entrar allí, pero lo conseguí. Allí estaba y casi me ponía a llorar.
Después de un día lleno de presentaciones y adaptaciones en la facultad, cogí mis libros de la mesa y salí de la clase. Me dirigía al edificio estudiantil, donde estaban todas las residencias asignadas a los alumnos internados. 

Primero fui al Parking a coger mis maletas del coche y cuando lo hice, entré a la residencia buscando la habitación 737, que era la que me había tocado junto a 2 estudiantes femeninas más. No permitían habitaciones compartidas con otras personas que no fueran de tu mismo sexo, y la verdad es que lo entendía, pero sabía perfectamente que habría alguno por ahí escondido, rompiendo las reglas.

Metí la llave y abrí la puerta encontrándome con las dos chicas (que serían mis compañeras de piso) ya desempacando sus cosas.

- ¡Hola! - dijeron las dos chicas a la vez. Parecían simpáticas y también parecían ya conocerse.
- Hola - respondí tímidamente - Me llamo Summer. Encantada.
Ambas se acercaron a darme un abrazo. Eran un amor.
- Yo soy Audrey. - dijo la muchacha castaña-pelirroja con ojos verdes grisáceos. Era una chica simple, pero muy mona.
-  Y yo Rachel. Igualmente. - contestó la rubia con ojos azules.
Después de desempacar y de ordenar y organizar un poco la habitación, comenzamos a hablar sobre cada una: Audrey Johnson estudiaba para ser enfermera. Al parecer, siempre le había gustado ayudar y todo el ambiente de los hospitales. Estaba en la facultad de medicina y venía de Masachussets. Era bastante tímida pero muy alegre. También tenía aspecto de ser muy intelectual, supuse que le fue muy fácil entrar a la facultad.

Por otro lado, Rachel Williams estaba en el Conservatorio de la Universidad, que era equivalente a una facultad de música. Llevaba estudiando música desde los 5 años, y al estar en otro conservatorio desde muy pequeña, su entrada a la universidad fue fácil. Estudiaba para dirigir musicales, cosa que me alegró mucho. Pertenecía también al departamento de música. Venía de California y no me extrañó: tenía toda la pinta y venía con el pack: rubia, ojos azules, piel más o menos bronceada pero sin exceso. Rachel era más extrovertida y muy atractiva. Aposté mentalmente que tenía un montón de chicos a sus pies.

- Y bueno, Summer, ¿qué hay de ti? - preguntó Audrey curiosa.
Sonreí.
- Estoy en la facultad de Criminología. - Y nada más decir aquello, ambas abrieron los ojos como platos, sorprendidas - Sí, es impactante. Lo sé.
- ¿Estudias Criminología para ser una de esas detectives-polis buenorras de series a lo CSI? - dijo Rachel, aún muy sorprendida y emocionada - ¡WOW! ¡Eso es realmente genial! ¡Me quito el sombrero ante ti!
Audrey y yo nos echamos a reír.
- Bueno, si lo das sentado como eso... - dije aún riéndome - Como sea, me gustaría realmente dedicarme a esto. En el instituto quise estudiar arte dramático pero por unas... cosas, cambié de idea.
Tragué saliva y recé porque no preguntaran específicamente el por qué. Y por suerte no lo hicieron, no sospecharon en absoluto de que les guardaba algo. Pero aún era muy temprano para hablar de aquel episodio de mi vida, acabábamos de conocernos.
- Jo, si hubieras elegido el camino de arte dramático ahora perteneceríamos a la misma facultad y encima yo sería tu directora. ¿Sabes lo genial que sería eso? ¡Sería épico! ¿Verdad, Auds? - seguía diciendo Rachel muy emocionada.
Y volvimos a reírnos. Hacía tan sólo 1 hora que nos conocíamos y parecía como si nos conociésemos de toda la vida. Aquellas dos chicas eran un amor de personas.

De repente, Rachel se levantó y alzó una ceja.

- Bien, Universitarias. Aún son las 7 de la tarde y paso de estar aquí toda la tarde. ¿Alguien quiere recorrer el campus?
 **** 
El campus era inmenso. Y decir lo anterior, era quedarse corta.

Había facultades por todas partes por los alrededores y los céspedes estaban muy bien cuidados y lleno de estudiantes más veteranas. Mirábamos todo boquiabiertas porque, nuestra universidad era impresionante. Los veteranos nos miraban riéndose, habían notado que éramos de primer año. Pero, ¿cómo querían que estuviésemos si la universidad era inmensa?

Rachel sugirió ir al departamento de música para enseñárnoslo. Al parecer, tenía un puesto bastante importante por haber estudiado en un conservatorio importante en California desde muy pequeña. Admiraba a Rachel por ello. Entramos y su despacho era muy luminoso pero muy... desordenado.

- Lo siento. - se disculpó Rachel mientras se ruborizaba - Es que estoy organizando la fiesta de la ceremonia del nuevo curso.
La miré sorprendida.
- Pero... aún es el primer día. ¿En serio tienes que hacer todo esto tú sola?
- Es verdad, si quieres podemos ayudarte, no hay tantas cosas que hacer por ahora y...
Rachel negó con la cabeza mientras sonreía.
- ¡Tranquilas! Llevo organizando esto desde el verano.
Audrey y yo nos miramos con los ojos como platos.
- Wow - dijimos ambas.
- Está bien, está bien. Tengo hambre. Vayamos a buscar comida y a chicos guapos.
Reímos y salimos de allí.

El primer día como universitaria no fue tan malo.

Introducción

Summer Young es una chica de 18 años que acaba de entrar a la universidad para estudiar Criminología. Sobre todo, quiere olvidar su pasado. Pero no olvidar a su hermano, que murió en un accidente de coche, sobreviviendo solamente ella. El conductor se dio a la fuga y nunca supo quién fue el culpable de la muerte de su hermano y ella está convencida que estudiando Criminología lo encontrará. Porque tiene un sexto sentido en ello. Ha entrado a la universidad sólo para eso pero... ¿y si no es eso lo único que encontrará en la universidad?